El otro día me encontré con una amiga que trabaja en una oficina, por lo que se pasa sus horas de trabajo sentada frente al ordenador. Después de hablar un rato con ella, me confesó que quería bajar de peso rápidamente y que iba a ponerse a dieta para solucionarlo…
Se había dado cuenta de que había ganado unos kilos de más desde que empezó a trabajar.
Adivina qué le contesté yo…
“¡Estás loca! Ponerte a dieta es la peor solución para perder peso”
“Déjame que te pregunte algo: ¿Alguna vez has hecho dieta y has conseguido perder peso para siempre?”
Y me dijo: “… perdí peso pero después lo recuperé… no conseguí ser constante… Pero, ¿qué alternativa hay a las dietas?”
Así que le contesté: “¿y si hubiera una forma de perder esos kilos para siempre sin poner restricciones sobre lo que comes o cuánto comes? ¿y su pudieras bajar de peso sin dietas estrictas?”
Naturalmente le picó la curiosidad…
Índice de Contenidos
Cómo perder peso sin dieta
En otro artículo te hablé sobre el mito de las dietas para perder peso.
“Las dietas no funcionan para perder peso a largo plazo”. Lo siento. Esto es algo que deberías grabar en tu mente a fuego.
¿Qué es lo que podemos hacer entonces para quitarnos esos kilos de más para siempre?
Nos toca crear nuestro propio estilo de alimentación y en este post te voy a enseñar exactamente cómo hacerlo paso a paso. Pero antes, déjame que te ponga en contexto…
Esta estrategia no se basa en ideas de mi invención. Lleva detrás mucha filosofía del budismo pero no te preocupes que no vas a tener que comprarte un cojín de meditación para empezar a usarla.
Déjame que te pregunte algo:
- ¿Cuántas veces después de un largo día llegas a casa y empiezas a devorar toda la comida que esté cerca de ti?
- ¿Alguna vez te ha pasado que después de un tiempo comiendo “sano” de repente te encuentras dándote un atracón de esa comida que tenías prohibida?
- Estoy seguro de que ya sabes la verdadera causa por la que ocurre esto: cansancio físico, aburrimiento, desahogo… Pero aquí no se trata de saber. Hay que saber y actuar.
Lo increíble de esta nueva forma de ver la pérdida de peso es que desde el primer momento que la usemos nos permitirá reconocer esas ganas de permitirnos un capricho detrás de otro y hacerlas tan pequeñas que no podrán descontrolarte.
Con el tiempo y práctica seremos fuertes y estables como un roble cuando venga la tormenta emocional de un mal día, una discusión con tu pareja, etc.
Estrategia completa para bajar de peso sin dieta
Más allá de los donuts, las judías o una hamburguesa hay otros formas de nutrientes. Me gusta decir que todas las personas nos nutrimos de:
- Alimentos y bebidas
- Sensaciones
- Sentimientos y emociones
Tan importante es uno como el otro. Cuando no tenemos en cada una de estas 3 formas en nuestra vida vemos los efectos negativos: aumento de peso, estrés, falta de energía, etc.
Vamos a ver cada uno de ellos con más detalle…
Alimentos y bebidas
La gran mayoría de gente piensa que comer es uno de los placeres de la vida. Otros piensan que comer es una forma de conseguir un cuerpo equilibrado y sano:
“O disfruto de la tarta o me conformo con una fruta”
Pero cuando nos sentamos a comer deberíamos ser capaces de calmar el hambre, de disfrutar de la comida y también de nutrir nuestro cuerpo y mente para vivir con más energía.
Todo en uno.
¿Cómo podemos hacerlo?
No es ningún secreto: come más alimentos que te ofrece la naturaleza y menos de lo que te ofrece el hombre.
No es por menospreciar el trabajo de las personas pero es que la naturaleza lleva siendo nuestro chef muchísimo más tiempo que los supermercados. Así que es natural que nuestro cuerpo funcione mejor con los alimentos a los que está acostumbrado.
¿Alguna vez te has hartado a comer y al cabo de un par de horas tu tripa volvía a rugir como un león? ¿Por qué nos pasa esto?
Porque nos hemos alimentado en abundancia pero no hemos nutrido a nuestro cuerpo. Déjame que me explique…
¿Recuerdas el juego de Mario Bros? Había momentos en los que tenías un montón de monedas a tu alcance. Otras pantallas del juego, por el contrario, no tenían ninguna moneda que pudieras recoger.
En nutrición, estas monedas son los micronutrientes que hacen que nuestro cuerpo funcione a pleno rendimiento: vitaminas, minerales, fibras, etc. Cuantas más monedas tiene nuestro cuerpo más satisfecho se siente y mejor nos sentiremos. Cuantas menos monedas tengamos más ganas de acumular alguna nos invadirán:
- Frutas y verduras son ricas, literalmente. Tiene muchísimas monedas en un sólo bocado.
- Una pizza del supermercado tiene prácticamente 0 monedas en comparación.
Con razón podemos comer casi infinitas porciones de pizza: aunque el estómago se llene, nuestro cuerpo no está recibiendo casi ninguna moneda que necesita (vitaminas, minerales, fibra, etc), así que pide más y más.
Sin embargo, con una rica ensalada de frutos secos, queso y atún, por ejemplo, nuestro cuerpo tiene todo lo que necesita para sentirse saciado y con energía así que comeremos menos cantidad para sentirnos satisfechos. ¿Y adivina qué? Comiendo menos perderemos esa grasa de más.
Y para solucionarlo, como he dicho antes, basta con comer más de lo que ofrece la naturaleza y menos de lo que ofrece el hombre.
“¡Espera, espera! Habías dicho que podría disfrutar de comida sabrosa… ¿y me hablas de ensaladas?”
Así es. Puedes disfrutar como nunca lo has hecho de una ensalada, de un brócoli o incluso de un té. Y próximamente compartiré contigo mi estrategia personal para conseguirlo.
Sensaciones
¿Alguna vez te has preguntado por qué comes lo que comes?
Imagina que empiezas el día escuchando la radio en el coche de camino al trabajo. Están hablando de la hamburguesa más grande del mundo.
Después suena tu canción favorita y entras motivado al trabajo. En el descanso, vas a la cafetería de enfrente y te cruzas con un autobús con publicidad de Burger King.
Acabas tu jornada laboral y antes de ir a casa, pasas por el supermercado y decides comprar comida sana. Pero cuando llegas a casa cansado de todo el día lo último que te apetece es cocinar.
Además a tus amigos les apetece salir a comer fuera así que les propones ir…. a una hamburguesería. ¡Como no!
La verdad es que todo lo que absorbemos a través de los sentidos es comida para nuestra mente: ver películas, oir un anuncio, oler la repostería del horno de la esquina, etc.
Muchas veces nos encontramos comiendo lo que quieren que comamos más que lo que queremos comer.
Pero lo que absorbemos por nuestros sentidos no sólo está relacionado con la comida…
- Una película de suspense nos puede llenar de ansiedad y tensión
- Un anuncio de aventura nos puede despertar las ganas de probar nuevas cosas.
- Un videojuego nos puede llenar de violencia y estrés.
Como en todo, las sensaciones que absorbemos pueden ser beneficiosas o perjudiciales para nuestra salud. El estrés, la tensión, los antojos, la tristeza y otras tantas pueden afectar negativamente a nuestro cuerpo y complicarnos la tarea de perder peso.
Al fin y al cabo, ¿no es más difícil tomar buenas decisiones cuando estás triste o tenso?
En resumen, todo lo que nos rodea en nuestro día a día afecta a las decisiones sobre qué comemos y también a cómo nos sentimos en nuestro interior. Por eso es importante lo siguiente: Sé consciente de lo que ves, lees y escuchas si quieres adelgazar
No queremos llenarnos de sensaciones que no nos aportan nada bueno. No. No estoy diciendo: “Nunca más veas una película de acción”. Simplemente date cuenta de que quizás ya has tenido suficiente acción durante el día y no sería bueno darle a tu cuerpo más tensión y violencia.
¿Y cómo podemos saber cuando nos estamos pasando de una sensación o cuando nos estamos dejando llevar por un anuncio de hamburguesa?
La mejor forma que he encontrado para ser consciente de nuestro alrededor y de lo que pasa en nuestro interior es…
…
…
¡Meditar!
No te asustes. No es nada extraño ni complicado. De hecho aquí tienes una demostración de cómo puedes meditar en 1 sólo minuto:
Todo lo que nuestros sentidos absorben influye en cómo nos sentimos y también en lo que comemos, así que es importantísimo ser conscientes de con qué sensaciones estamos alimentando a nuestro cuerpo.
Para descubrirlo usa la meditación en 1 minuto. Después de ella, mira a tu entorno y descubre cómo te hace sentir.
Sentimientos y emociones
Este tercer nutriente… es fundamental. No me explico por qué no lo nombran en todos los sitios dedicados a perder peso. ¡Debería estar hasta en la sopa!
Cuando piensas en una dieta cuando quieres perder peso. ¿Qué es lo que pasa por tu mente? Por ejemplo, puedes pensar:
“Estoy demasiado gordo. Tengo que perder unos kilos”
“A ver, déjame que piense… ¿por qué he engordado?”
“Como demasiado para el poco ejercicio que hago.”
“Por tanto, la razón por la que he engordado es que como más de la cuenta”
Así que decides comer menos menos adoptando una dieta. Todo tiene sentido, ¿verdad?
Esto te sorprenderá: La verdadera razón que le causó coger unos kilos no fue comer demasiado. Comer de más era sólo un síntoma de algo más que había escondido.
¿De qué hablo? Usando la meditación, por ejemplo puedes descubrir que tu rutina de trabajo te aburre y eso te hace comer entre horas para llenar ese vacío.
¿Ves lo que había debajo? En general, solemos comer para no enfrentarnos a nuestros sentimientos internos.
Cuando tengas la tentación de comer respira profundamente y después pregúntate: “¿De verdad estoy hambriento o estoy aburrido/triste/etc?”. Aprenderás a controlarte poco a poco con la meditación.
Y si no tienes hambre… no comas. Si estás aburrido, haz algo divertido. Si estás triste, alégrate. Pero no recurras a la comida siempre.
Puedes pensar que tu caso es distinto, que tu no tienes estos problemas. Pero te garantizo que la abrumadora mayoría de las personas come varias veces de forma emocional. Quizás sea mucho más sutil y necesites prestarle más atención a tus sentimientos. ¡Perfecto! Esto es una excusa ideal para meditar y empezar a tomar decisiones conscientes.
Comer demasiado no es la causa del sobrepeso sino un síntoma. Comer de más nos está diciendo a gritos que existe un sentimiento o emoción en nuestro interior al que no estamos prestando atención.
Así que vas a comer y no estás hambriento/a haz esto:
- Medita para calmar el jaleo de tu mente y relajarte.
- Averigua si te sientes triste, aburrido, eufórico y por qué.
- Ponle la solución oportuna: combate tristeza con hacer algo alegre, aburrimiento con diversión, etc
¿Qué te ha parecido la estrategia? Deja tu respuesta en los comentarios.